Parece ser que cuando se evoca el recuerdo y la sensación de una música escuchada, se activan las mismas zonas del cerebro que cuando se oía en la realidad. Y cada vez me apetece más intentar pasar a este blog una especie de recuerdo de lo que voy escuchando en el día a día. Tal vez sea otra forma de activar esas zonas que sólo la música pone en movimiento.
Beethoven decía que la música es el medium que comunica el mundo de los sentidos con el mundo espiritual. Y si fuera así, ese camino merece ser andado y desandado una y otra vez, en una y otra dirección.